Promesa de Campbell

«El mundo está hecho para los hombres. Estamos en inferioridad en cuanto a fuerza bruta, pero hay algo que nosotras tenemos y que ellos jamás alcanzarán a comprender cuanto poder de determinación tiene. La necesidad de sobreponernos a los golpes del destino, rebelarnos y decidir sobre nuestra propia vida. Somos capaces de cualquier cosa para sobrevivir, al fin y al cabo, si Dios quiso que las mujeres trajésemos niños al mundo, es porque somos más fuertes que ellos»

La anterior entrega de esta serie, «Palabra de McKenzie», había dejado el listón tan alto que tenía muchísimo miedo de que esta historia me defraudase o simplemente, no estuviese a la altura de su predecesora. Ahora que la he finalizado respiro tranquila, ya que «Promesa de Campbell» es una historia maravillosa y que ha logrado emocionarme con la intensidad de algunos de sus pasajes.

Echaba de menos leer una novela que no fuera a lo fácil: chica rebelde, hombre hosco. Me gustó mucho Palabra de Mackenzie, pero en Promesa de Campbell he encontrado el tipo de historia perfecta para Desmon y Tara. Él es un hombre dolido por su pasado y ella una mujer que no sabe lo que es el amor y vive con miedo. Una historia muy bien escrita, personajes bien perfilados y el extra del marco de detalles y localizaciones reales de la historia de Escocia. La recomiendo.